Recuento de los daños 2009

Ahorita pensaba en que no he subido nada a pasameunpostit, e intente excusarme argumentando que últimamente ha habido demasiado cosas que hacer.

Pero no es verdad, estoy en medio de uno de esos momentos de calma. Pienso que tal vez se debe a que acabe muy bien el semestre, estoy en mis primeros tres meses de relación con Pedro, tengo vacaciones y francamente no hay nada que me perturbe o mortifique.

Creo también que es una irresponsabilidad de mi parte dejar de escribir, ya que durante este fakin 2009 vaciar mi cabeza en este blog fue una de mis valvulas de escape. De verdad hubo momentos que era tanto el sentimiento que solo las palabras lograban calmarme.

Por eso vengo aquí, pensando en el recuento de los daños de este año. Y es que es curioso hacer memoria cuando tu estado de animo es todo dummie, feliz y amoroso. Porque hoy en la tarde mientras hablaba con .pd sobre los planes para pasar de año, me pregunto que cual era mi prisa para que llegara el 2010, obviamente lo mire con cara de no sabes que tan malo ha sido este año para mi y quise soltarle un sinfín de razones que lo respaldaran.

Esta seria mi lista:

Fakin 2009:

- la muerte de mi abue nena.
- la despedida de Horacio.
- el horrendo 14 de febrero.
- el beso el tercer día de mi octavo semestre entre mi ex y ella.
- el noviazgo asqueroso de los antes mencionados.
- las tristezas de mis amigas.
- la apuesta del chocolate en brasil.
- el acoso de la novia psycho.
- que Pd haya dicho que no le gustaba.
- la enfermedad de mis abuelos.
- la clase de patrimonio industrial.

Pros del 2009:
-mi cumpleaños numero 22
- mi viaje a Brasil :)
- ida a ver a the killers a mty.
- Pedro, en todas sus variantes.
- mi familia para Navidad
- la ida al paso con mi papá y las ge.
- las horas en el pasillo con Ulises.
- el viaje a tejo.
- las clases de noveno semestre.
- @sara_mar
- la llegada e ida de mi tía Lola.
- las inumerables películas con la chica simple.
- y las tantas banderitas para pasar el mal momento.
- las horas con las chikas, platicando, recordando, riendo, comiendo, etc.

Supongo que analizandolo bien fue un año asqueroso en sus primeros 6 meses, maldito octavo semestre y sus entornos. Pero las vacaciones de verano trajeron nuevas cosas y este noveno semestre termino bastante decente. Me vería mal si me quejara, así que no lo hago.

Solo doy gracias porque este año llega a su fin, y el 2010 promete.

Por cierto: Yo en el 2010 seré arquitecto :)

Justo donde te quería tener.

Bienvenida, ponte cómoda. Tanto me buscaste -según me dijeron- e, irónicamente, aquí nos venimos a encontrar.
Me pregunto ¿qué puedo YO hacer por ti? Yo, que te descubrí merodeando por noches y madrugadas entre mis sueños. Yo, que huí de ti para que fueras más feliz, para que la tranquilidad te llenase mientras mis ojos se ahogaban en lágrimas y mis pensamientos se perdían en absurdos. Yo, que me aguanté "como las hembras" hasta lograr que la cordura retomara su andanza dentro del camino de mis actos.
Y tú... Realmente no tengo idea que hacías tú. Pero ahora sé que andas por aquí -con tu terquedad- buscando respuestas, mismas que -para mi gusto- no te incumben. Te lo digo sinceramente: mejor para ti que no te interesen, porque yo me vanaglorio de tu insistencia; me río de la forma en que indagas mi mundo pretendiendo compararlo con el tuyo; me alegro de tu necesidad de mi (y no de hacerme tuya, sino todo lo contrario: tus ganas de eliminarme del mapa, de ser yo).
Ahora, como madre que se propone mostrar al crío algo de su experiencia, pretendo obtengas pronto la madurez necesaria - que te hace falta, según veo- para que entiendas de una vez por todas que lo que te daré es un consejo y no un regaño. Si, leíste bien, me propongo como institutriz para ilustraros en los menesteres que tan sigilosamente solicitáis:
Los sujetos, a semejanza de los objetos, de alguna manera nos relacionamos con otros. Pasamos de mano en mano, dejando y tomando en cada uno de los otros lo que nos es permitido: conocimientos, experiencias, sentimientos. Lo hacemos en la medida de nuestras necesidades y capacidades. Pero -escucha bien crío mio- no pienses que se anda como la abeja "de flor en flor" y no se pide nada a cambio. No.
En cada hospedaje dentro del calor o frivolidad de los brazos ajenos, vamos impregnándolos de algo que sería para nosotros como la zapatilla para cenicienta... justo lo que nos hace ser: nuestra esencia. No se deja todo (claro está) pero si una fracción de similar tamaño a la que vamos a tomar. Vamos creando lazos afectivos, similitudes de pensamiento; vamos creando "lo nuestro" a través del intercambio de cuerpo y nimiedad... a través del utópico y eterno encuentro de las almas.
Ahora, crío mío, no pretendas poseer algo en su versión más natural, ni en la más virginal e inmaculada. Lo que se quedó de mi en él, poco se removerá. Mejor deja tu propia huella: tierna, joven o inocente... pero al fin tuya. Sólo te puedo recordar y dejar claro que:
yo No Era. Soy.