Y si, recuerdo como tu mano izquierda tomaba mis muñecas con fuerza sobre mi cabeza. Empujando mi cuerpo sobre la pared, mientras que tu mano derecha jugaba conmigo sin cesar y tu boca recorría, mordía y besaba todo lo que estaba a su alcance.
Recuerdo que detenías toda esa locura y muy serio preguntabas:
- ¿Eres mía?
-Sí, soy tuya.
- ¿Solo mía?
- Sí, solo tuya.
- ¿Para siempre?
- Sí, lo juro para siempre. Tuya solo tuya, Por favor…
Y continuabas, con más fuerza que antes, con mas deseo, con más valor.
Lastima que al final eso de para siempre, no fuera real.
Por que ya no sera más.
3 comentarios:
muy muy lindo, pero nada es para siempre
creo que se me antojo. (1shy)
nada es para siempre, pero lo bueno siempre será bueno...
Publicar un comentario